Se acabó el culebrón. Leo Messi seguirá en el Barcelona al menos hasta el próximo 30 de junio después de que haya descartado salir en el actual mercado estival. Ha sido el propio jugador el que lo ha anunciado este viernes en unas declaraciones a Goal.com y está previsto que se reincorpore de inmediato a los entrenamientos.

El anuncio se veía venir después de las reuniones que mantuvo el padre del futbolista con Bartomeu. El pasado miércoles, el presidente le dejó muy claro que no estaba dispuesto a vender a Messi y se remitía a los 700 millones de la cláusula de rescisión. Se negaba en rotundo a poner un precio de salida al jugador.

A Messi no le quedaba otra que denunciar el contrato que tenía con el Barcelona. Y eso suponía ir a los tribunales en un largo proceso que minaría su imagen y la del club. Además, Manchester City y PSG, equipos interesados en él, no querían entrar tampoco en un fichaje instalado en los tribunales.

Por este motivo, el futbolista ha descartado la idea de dejar el Barcelona porque no quería denunciar al club azulgrana: «Nunca iría a juicio contra el Barcelona porque es el club de mi vida. Si esa es la única vía para salir, me quedo», dijo en Goal.com.

Ante esta situación de bloqueo. Messi, que el pasado 25 de agosto mandó un burofax pidiendo su salida del Barcelona, ha decidido dar marcha atrás y quedarse en el club azulgrana para cumplir el año que le queda de contrato.

Anteriormente, había dejado clara su postura respecto a la cláusula de rescisión en una carta que mandó su padre, Jorge Messi, a Javier Tebas en la que se reafirmaba que no tiene validez por lo que ningún club tiene que pagar 700 millones para comprar al futbolista.

Leo Messi ha explicado en una entrevista con Goal (en charla con Rubén Uría) todo lo vivido en las últimas semanas y su decisión final de quedarse en el Barça, dejando entre sus reflexiones una crítica frontal a Josep Maria Bartomeu.

«Le dije al club, sobre todo, al presidente, que me quería ir. Se lo llevo diciendo todo el año. Creía que era el momento de dar un paso al costado. Creía que el club necesitaba más gente joven, gente nueva y pensaba que se había terminado mi etapa en Barcelona sintiéndolo muchísimo porque siempre dije que quería acabar mi carrera aquí. Fue un año muy complicado, sufrí mucho dentro de los entrenamientos, en los partidos y en el vestuario. Se me hizo muy difícil todo y llegó un momento que me planteé buscar nuevos objetivos, nuevos aires. No vino a causa del resultado de Champions ante el Bayern, la decisión llevaba pensándola mucho tiempo. Se lo dije al presidente y bueno, el presidente siempre dijo que yo al final de temporada podía decidir si me quería ir o si me quería quedar y al final no terminó cumpliendo su palabra».

Las críticas a Bartomeu y su Junta no se quedan ahí. El argentino dispara al señalar que «hace tiempo que no hay proyecto ni hay nada, se van haciendo malabares y van tapando agujeros a medida que van pasando las cosas».

La decisión

«Claro que me costó mucho decidir. No viene del resultado del Bayern, viene de muchas cosas. Siempre dije que quería acabar aquí y siempre dije que me quería quedar aquí. Que quería un proyecto ganador y ganar títulos con el club para seguir agrandando la leyenda del Barcelona a nivel de títulos. Y la verdad que hace tiempo que no hay proyecto ni hay nada, se van haciendo malabares y van tapando agujeros a medida que van pasando las cosas. Como dije antes siempre pensé el bienestar de mi familia y del club».

¿Por qué tardó tanto en hablar?

«Primero porque después de la derrota de Lisboa fue muy duro. Sabíamos que era un rival muy difícil, pero no que íbamos a terminar de esa manera, dando esa imagen tan pobre para el club y para el barcelonismo. Dimos muy mala imagen. Estaba mal, no tenía ganas de nada. Quería que fuera pasando el tiempo para después salir a aclarar todo».

¿Se sintió solo?

«No…No me sentí solo. Solo no. A mi lado han estado los que están siempre. Eso me basta y me fortalece. Pero sí me sentí dolido por cosas que escuché de la gente, del periodismo, de gente poniendo en duda mi barcelonismo y diciendo cosas que creo que no me merecía. También me sirvió para ver quién es quién. Este mundo del fútbol que es muy difícil y hay mucha gente muy falsa. Esto que ha pasado me ha servido para reconocer a mucha gente falsa que tenía en otra consideración. Me dolió cuando se puso en duda mi amor por este club. Por más que me vaya o me quede, mi amor por el Barça no va a cambiar nunca».

¿Qué ha sido lo que más le ha dolido?

«Un poco de todo, lo de los amigos de Messi, lo del dinero… han dolido muchas cosas que se han dicho. Siempre antepuse el club antes que cualquier cosa. Tuve posibilidad de irme del Barça muchas veces. ¿El dinero? Todos los años pude irme y ganar más dinero que en el Barcelona. Siempre dije que esta era mi casa y era lo que sentía y siento. Mejor que acá es difícil. Sentía que necesitaba un cambio y nuevos objetivos, cosas nuevas»