EBarcelona ha hecho oficial el fichaje de Pau Gasol hasta final de temporada. El anuncio del bombazo más deseado por los azulgranas se produce justo antes de que este miércoles expire el plazo para inscribir jugadores en la Euroliga que no hubiesen participado ya esta temporada en otro equipo, como es su caso. El sueño de los culés pareció torcerse cuando el Barcelona filtró el pasado sábado las negociaciones y el jugador se enfadó, pero por fin se ha hecho realidad.


El de Sant Boi, que en julio cumplirá 41 años, no disputa un partido desde marzo de 2019, necesitaba un equipo para recuperar la forma y poder estar este verano en los Juegos de Tokio, su gran sueño, y qué mejor que hacerlo en el club de toda su vida, del que salió hace ya 20 años rumbo a la NBA. El regreso del hijo pródigo es una magnífica noticia para el Barcelona y para el baloncesto español, que recupera al mejor jugador español de la historia.

Pau necesitaba en la última fase de la recuperación de la fractura del escafoide tarsiano de su pie izquierdo, que va por muy buen camino, necesitaba coger ritmo de competición para completar definitivamente su puesta a punto, y el conjunto azulgrana le ofrecía esa posibilidad.

COBRARÁ LA PARTE PROPORCIONAL DEL SALARIO MÍNIMO

No jugará gratis, pero casi considerando los salarios siderales que ha tenido en la NBA las dos últimas décadas. Cobrará la parte proporcional del salario mínimo estipulado en el vigente convenio colectivo: 68.337. Podría percibir unos 30.000 euros por los cuatro meses que estará bajo la disciplina azulgrana. El dinero, claro está, no era importante para él.

De esta manera Pau Gasol vuelve al equipo que le vio nacer. La cantera en la que dio sus primeros pasos junto a su querido Juan Carlos Navarro, hoy responsable de la cantera del baloncesto azulrana, y en la que explotó como mejor jugador del baloncesto español en apenas una temporada, antes de emigrar a la NBA y convertirse en el mejor jugador español de todos los tiempos.

AÍTO LE DIO LA ALTERNATIVA EN EL BARCELONA EN 1999

Fue el 17 de enero de 1999 cuando el maestro Aíto García Reneses le dio la la alternativa frente al Cáceres en un partido que el Barça ganó sobrado. Pau no anotó en ese partido, pero su nombre empezó a sonar en los mentideros del basket nacional, que terminaría rendido a sus pies apenas dos temporadas más tarde.

Esa temporada 99-00 disputó cuatro partidos más, pero dejó lo mejor para la siguiente. Aíto le reclamó en la primera plantilla para suplir a Rony Seikaly, que llegó con vitola de estrella de la NBA pero no cuajó y terminó siendo sustituido por un chaval de 19 años que fue el MVP de la final de la Copa del Rey de Málaga en la que el Barcelona se impuso al Real Madrid. Había nacido una estrella.

JASIKEVICIUS, SU EXCOMPAÑERO Y AMIGO, SERÁ SU ENTRENADOR

Semanas antes del draft, levantó también el trofeo de campeón de la LIga ACB en cuya final volvió a ser el jugador más valioso. Era ya un jugador imparable y que marcaba diferencias. En ambos títulos Pau Gasol contó con la ayuda de Sarunas Jasikevicius. El lituano fue una pieza fundamental de los éxitos del Barcelona y ahora es una de las piedras angulares del proyecto ganador del equipo azulgrana como máximo responsable desde el banquillo.

Ahora tendrá a su disposición como pupilo al que fue su compañero y amigo. En las negociaciones con el Barcelona Jasikevicius y Pau ya hablaron por teléfono sobre el plan a seguir una vez que se consumase su incorporación. Seguro que el lituano no se precipitará a la hora de dar minutos a su nuevo pupilo, ni éste a asumir responsabilidades hasta que no esté totalmente recuperado y coja ritmo de competición.

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