UN PROBLEMA DE MERCADO
El Barça planea una revolución para este mercado veraniego. Es algo necesario si se quiere dar un vuelco a la situación actual después de pasar un año en blanco y cayendo en Europa a las primeras de cambio. No será fácil, pues el límite salarial sigue disparado y, ahora mismo, a no ser que haya alguna salida, no se puede inscribir a ningún futbolista.
LaLiga, mediante su control económico, no permite utilizar al Barça todo lo que desprenda de masa salarial. Como hace unos meses, se tendrá que ajustar a la regla 1/4 y 1/3, ya que la regla 1/2 expira el 1 de julio. Esto significa que por cada tres o cuatro euros que aligere, solo podrá inscribir un euro dependiendo si el futbolista supera, con su ficha, el 5% de la masa salarial click aquí total de la plantilla.
El primero en salir ha sido Coutinho dirección Birmingham, concretamente al Aston Villa donde actuaba como cedido. El brasileño, que superaba ese 5% de masa salarial, teniendo una ficha cercana a los 20 millones brutos, es por uno de los jugadores que más puede respirar la dirección azulgrana. En este caso se aplicará la regla 1/3, así que de los, aproximadamente, 20 ‘kilos’ el club podrá contar con el 33% para poder inscribir. Si aplicamos la regla 1/4 con otro futbolista, el Barcelona contaría con tan solo el 25%. En estas reglas no se cuenta la amortización pendiente.
Además, si finalmente la entidad presidida por Joan Laporta acepta el acuerdo con CVC, 40 millones irán directamente al Fair Play Financiero con lo que tendrán más maniobra para actuar. Desde el club siguen sin ver clara esta operación pese a que es la vía más rápida y directa para paliar la deuda actual junto a una buena venta de Barça Studios.
La decisión de la dirección de fútbol es salomónica. La prioridad es reforzar la defensa sin olvidar al deseado delantero centro. Con Christensen atado, se busca un lateral derecho, un lateral izquierdo y, si es posible, un central más. Con un Gerard Piqué que continuará una temporada más y, además, siendo uno de los mejores defensores de la plantilla y sumando a Araujo, Eric García y al ex del Chelsea, esa zona quedaría equilibrada con cuatro centrales de nivel.
El dolor de cabeza llega en el lateral derecho. Dest no ha dado ese paso hacia adelante que se esperaba, Dani Alves es una incógnita y Sergio Roberto es un complemento más que un titular. Con Mazraoui en Múnich, el Barça deberá negociar con el Chelsea por Azpilicueta y, quizá también, por Marcos Alonso para que sea competencia de Jordi Alba. Pero, todo esto, está supeditado a las salidas y que se genere espacio en la masa salarial.